Pipo Lopez (diario AS)

Dia 6

El Mundial me ha dado muchos hermanos, personas que forman parte de mi vida de los buenos y de los malos momentos que todos pasamos en este planeta. Pipo es uno de ellos, con el que estoy en deuda eternamente gracias por querer compartir esta locura...

LA VACA HA MORT

Rally Acrópolis de 1997. Al caótico aeropuerto de Atenas llegaba con el cansancio acumulado de la larga fiesta vivida la noche anterior. Carlos Sainz había ganado, junto a Juha Kankkunen habían logrado el doblete para Ford, y Seat también había ganado entre los vehículos de 2 litros. Estuvimos por ello casi hasta el amanecer en una bonita discoteca a orillas del mar, un local al que Kankkunen había intentado entrar varias veces y que nunca le dejaron, pero al que esta vez sí pudo acceder. El rubio alucinó, porque de camino nos decía que allí no nos dejarían entrar, pero Juanjo Lacalle le explicó que mi padre había viajado a Atenas hacía veinte años, y que tuvo un romance con una chica griega, fruto del cual había nacido un niño...y precisamente ese niño era el portero de la discoteca. Un portero que alucinó cuando vio llegar desde el parking a unos quince tíos, entre los que estaban Sainz y Kankkunen. Yo le abracé como si fuera mi hermano, y entramos. Juha alucinó y se pasó toda la noche intentando averiguar si de verdad era mi hermano.
Poco antes de montar en el avión sonó mi teléfono móvil. Era mi mujer para anunciarme que mi abuelo Julián, Lalo, antiguo amigo de Don Antonio, el padre de Sainz, había muerto. La alegría se convirtió en profunda tristeza, aunque por suerte mis amigos me arroparon con mucho cariño.
Ya en el avión la cosa comenzó a cambiar. Cuando las azafatas estaban dando las instrucciones de seguridad, a la hora de mostrar los cinturones de seguridad se levantaron, medio centenar de manos con el suyo fuera de su lugar. Eran los hombres de Seat, que habían conseguido sacarlos para hacer la broma que, por otro lado, hizo mucha gracia a la tripulación.
En pleno aire alguien cogió el micrófono y dijo en catalán: “El campeón del mundo Tommi Makinen ha sufrido un accidente contra una vaca....la vaca ha mort”. Era la voz de José Antonio Ponseti, que se las apañó para que la tripulación le dejara repetir la magistral crónica del inigualable Martí Trilla en Cataluña Radio cuando Makinen tuvo un choque contra una vaca (que, efectivamente, murió) en el Tour de Córcega. Martí también venía en el avión y no se lo tomó bien, aunque cuando le explicamos que no había mala intención se le pasó el cabreo.
Pero poco después las azafatas vinieron a decirnos que el pasajero del asiento 11ª, un venezolano, había presentado una reclamación por haber escuchado por megafonía a alguien hablando en catalán. De todos es sabido mi poco afecto por Carod Rovira, al que entonces, por suerte, aún no conocíamos, pero lo de ese tipejo era tan ridículo que pedimos nosotros otra hoja de reclamación. Reclamamos contra el pasajero del 11ª por boludo, y prácticamente todo el avión, los del rally y los que no lo eran, firmó el papelito para mayor cachondeo de la tripulación.
Lo cierto es que el que podía haber sido uno de los vuelos más tristes de mi vida se convirtió en uno de los más divertidos por todo lo que pasó. Entre unos y otros consiguieron que se me pasara en parte la gran pena que tenía por la pena de haber perdido a mi abuelo. Y es que entonces vivíamos un gran ambiente en los rallys, un ambiente que no se si se repetirá, pero que desde luego ahora no se conoce. Sainz, Kankkunen, los de Seat, Martí Trilla...y Ponseti, ese personaje que si no hubiera existido, habría que haberlo inventado. Un abrazo para todos.
Pipo López